Mantener limpias canaletas y techos.
Mantener las vías de evacuación de aguas libre de tierra, hojas, escombros, etc.
Efectúe una revisión preventiva de las instalaciones eléctricas. Evite el uso excesivo de artefactos eléctricos que generen un sobrecalentamiento de los cables eléctricos.
Verifique el estado de estufas, chimeneas, calderas, etc., para evitar posibles incendios o asfixia.
Cuando mantenga estufas encendidas dentro del hogar asegúrese que exista siempre una entrada de aire que lo renueve y evite la acumulación de gas si existe una falla.
No use estufas a gas o parafina en dormitorios.
No sobrecargue el sistema eléctrico.